Partido Comunista del Perú
patria roja
célula Socabaya
¡¡¡ CON EL EJEMPLO DE JULIO PEREZ Y EL SOCIALISMO… VENCEREMOS!!!!
Soy un hombre del Sur
con la cabeza encrenchada de relámpagos
y la estatura de la montañas familiares.
De mis labios gotea ozono
de un pedazo de cielo
que he mordido con los nervios.
…………….
Caminante de los yermos andinos,
no conozco la piedra del reposo,
voy del Sur hacia el Oriente
en busca de Manco o de Lenin.
Cesar Atahualpa Rodríguez
(fragmentos del poema Atahualpa, 1926)
En los últimos días, a través de los medios de comunicación, diversas personas y dirigentes han venido mostrando el reconocimiento al cc. Julio Perez, todos ellos han resaltado su capacidad de lucha, su entrega, su condición de luchador social, de dirigente popular, hasta de izquierdista, pero nadie ha mencionado su militancia, nadie se atrevido a decir que es Comunista.
Si, ha muerto un Comunista. El cc. Oscar –su nombre de lucha- asumió desde joven la militancia, la asumió con fervor y conciencia. Hecho que se hizo más fuerte en condiciones adversas, viviendo a contracorriente del sistema capitalista, peleando en cada trinchera, sin pedir tregua y sin arriar banderas.
Hoy que todos reconocen la calidad de un militante comunista, tenemos el deber de alzar la voz y decir que los comunistas son luchadores sociales, que la capacidad de entrega se ha probado en mil combates, que son dirigentes que ponen por delante los intereses del pueblo, que forjan el poder popular para cimentar el socialismo y que luchan por el pan, la belleza y la alegría. Decir que todo ello tiene una sola fuente: la convicción comunista.
Somos comunistas, estamos orgullosos de ello. Ese es el camino a continuar. Así como la autocritica es rectificarse en los hechos y no en la palabra, continuar el camino por donde marchaba el cc. Julio Perez es avanzar en la senda de dar un nuevo curso a nuestra patria, en el logro del socialismo y el comunismo. Tengamos la firme convicción de avanzar.
"y lo repito una vez más: he vivido por la alegría, por la alegría he ido al combate y por la alegría muero. Que la tristeza no sea unida nunca a mi nombre"
Julios Fucik
Comunista checoslovaco
Masa
César Vallejo
Al fin de la batalla,
y muerto el combatiente, vino hacia él un hombre
Y le dijo: «No mueras, te amo tanto!»
Pero el cadáver ¡ay! Siguió muriendo.
Se le acercaron dos y repitiéronle:
«No nos dejes! ¡Valor! ¡Vuelve a la vida!»
Pero el cadáver ¡ay! Siguió muriendo.
Acudieron a él veinte, cien, mil, quinientos mil,
clamando: «Tanto amor, y no poder nada contra la muerte!»
Pero el cadáver ¡ay! Siguió muriendo.
Le rodearon millones de individuos,
Con un ruego común: «¡Quédate hermano!»
Pero el cadáver ¡ay! Siguió muriendo.
Entonces, todos los hombres de la tierra
Le rodearon; les vió el cadáver triste, emocionado;
incorporose lentamente,
si Abrazó al primer hombre; echóse a andar.
¡¡¡¡ cuando un revolucionario muere, nunca muere!!!
¡¡¡ha muerto un revolucionario, viva la revolución!!!
cc. Julio Perez
¡¡Presente!!
Ahora y siempre
16 julio 2010 Célula Socabaya
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